Una vida de contradicciones. Cuando Reggae Chalice me pidió que escribiera una reseña sobre un disco a mi elección comenzó el dilema: ¿qué disco? ¿actual o clásico? ¿por qué ese en particular? ¿qué características debía tener para elegirlo?.
Quizás no tiene mucho sentido darle tantas vueltas, pero cuando este ritmo te apasiona tanto y hace largo tiempo, no es fácil elegir entre tantos favoritos uno solo para “homenajear”. Pasaron nombres como Chronixx, Protoje o los clásicos Morgan Heritage con su nuevo disco ganador del grammy entre las ideas de discos actuales que me han quedado dando vueltas en la cabeza, donde el nivel de producción musical es más que destacable y digno de resaltar.
Por otro lado, circulaban nombres como The Abyssinians, Steel Pulse o The Gladiators que han dado a luz a los discos clásicos que probablemente más han marcado mi gusto por el Reggae. Pero hace no mucho re-descubrí un disco que me parece perfecto para la ocasión, de un personaje trascendental en la historia de esta música y directamente responsable de su importancia a nivel mundial.
Me refiero al gran maestro Joe Higgs, cantante, compositor, instrumentista y productor, ese que tomó a los Wailers y a Wailing Wailers y los encerró a ensayar, les enseñó de música, a tocar instrumentos, a pulir sus habilidades y también les enseñó sobre el negocio de la música, para que una vez que estuvieran listos, mostraran al mundo su gran talento.
Así de importante es este hombre y creo que cualquier homenaje se hace poco. Mal que mal, no a cualquiera lo cataloga de genio desde Bob Marley hasta Jimmy Cliff. Ahora, ¿qué disco de Joe Higgs?, a mi gusto, el que es considerado su primer trabajo más personal, donde él tuvo las riendas del resultado, el disco llamado “Life of Contradiction” del año 1975, grabado bajo el sello Island Records en 1972, quienes le liberaron los derechos para editarlo por su cuenta tres años más tarde luego que Chris Blackwell decidiera que no tenía como introducir un disco de “Folk-Reggae” al mercado mundial y bajo las sospechas de Higgs de que no quería comprometer el trabajo del sello junto a Marley. Fue re-editado recientemente el 2008 por Pressure Sounds en Inglaterra.
La trayectoria de Higgs es muy amplia, desde sus primeros días junto a Roy Wilson en Studio One en los sesentas, donde aparecieron algunos de los temas que formarían, casi una década después, parte de este clásico álbum, pasando por sus trabajos con Prince Buster, y su trabajo solista hasta el año 1999, cuando fallece. El sonido del disco es áspero, crudo, perfecto para envolver el contenido de un registro que expone la vida de una persona que sufre, que tiene esperanza, que ama, que vive. Esto es sin maquillaje, brutalmente honesto, no es solo un disco, es un concepto, la belleza de vivir cuando hay fe, aunque los tiempos sean difíciles.
La música es la simpleza en su máxima expresión, solo el ritmo, acá no hay dub, ni marcados arreglos rítmicos o armónicos, la música cumple la función de acompañar un relato, una historia cotidiana, la poesía de un trovador, los instrumentos se vuelven protagonistas al ser el ambiente perfecto, la escenografía de una obra que no vemos pero escuchamos y sentimos. Acá se escuchan las fuertes influencias que tuvo tanto el góspel, el soul, blues y el R&B, en su música, encontrando arreglos muy influenciados por los sellos tipo Motown, Stax o Athlantic.
Destacan los músicos participantes como Val Douglas, Earl “Wire” Lindo, Robbie Lynn, Mickey Chung y Eric Gale (si, toda una constelación de estrellas!). En resumen, este es un disco para los amantes del Roots clásico, ese de los años 70s, con un sonido nostálgico, sucio e imperfectamente perfecto. Tema recomendado: “There’s a reward” (y para los con buena memoria, es el mismo que sale guitarreando Higgs en el documental “Roots Rock Reggae – Inside the Jamaican Music Scene“ (1977)). Disfrútenlo!
Álbum: LIFE OF CONTRADICTION
Artista: Joe Higgs
Año: 1972, Island Records
Por Matías Malinarich.
Sonidista, guitarrista y fundador de la banda Kitra