Cannabis medicinal da un nuevo paso adelante en el Congreso

  • Comisión de Salud aprobó en particular la iniciativa que será discutida en la Sala de la Cámara.

Una buena noticia recibieron los pacientes que utilizan cannabis para el tratamiento de sus dolencias luego que la comisión de Salud de la Cámara de Diputados aprobara el proyecto que busca regular el uso medicinal de la marihuana y evitar que estos usuarios enfrenten un proceso judicial o, incluso, la cárcel.

Si bien la iniciativa ya había sido aprobada en general por la Sala de la Cámara tuvo que volver a análisis a la comisión de Salud debido a la presentación de una serie de indicaciones, la mayoría de las cuales fue desestimada, por lo que el texto aprobado inicialmente se mantuvo sin grandes modificaciones.

En particular, el grupo parlamentario analizó ocho indicaciones de las cuales solo fueron aprobadas la que especifica la calidad de médico cirujano “tratante”, en el caso del profesional que prescribirá el tratamiento con productos derivados de la cannabis; y otra que cambia el concepto de “documento médico” por el de “prescripción médica”.

Con estos cambios, el proyecto -que busca agregar un único artículo al Código Sanitario- establece que “tratándose de la fabricación de productos derivados de especies, subespecies y variedades del género cannabis, destinados a la atención de un tratamiento médico, deberán ser prescritas por un médico cirujano tratante, mediante la correspondiente receta extendida de acuerdo a lo dispuesto en la ley y en el (futuro) reglamento. Esta prescripción médica deberá indicar además el diagnóstico de la enfermedad, su correspondiente tratamiento y la forma de administración del cannabis, que en ningún caso podrá ser mediante combustión”.

Además plantea que la citada receta constituirá autorización suficiente -respecto a la establecido en  el artículo 8 de la Ley 20.000, que indica las severas sanciones por cultivar plantas de cannabis- cuando especifique la dosis necesaria, el tiempo de duración del tratamiento, y corresponda a alguna de las enfermedades susceptibles de ser tratadas mediante estos productos”.

Finalmente, especifica que corresponderá al médico tratante fundamentar en su diagnóstico la pertinencia del tratamiento indicado en la receta médica y que no se considerarán como falsificados los productos naturales derivados de cannabis, siempre que su uso sea prescrito con fines medicinales.