Una querella criminal por vulneración de los derechos fundamentales contra Carabineros es lo que presentó hace algunos días atrás Daniel Serey, un hombre de Maipú, padre de familia que profesa la fe Rastafari, quien a mediados del mes de mayo y con motivo del estado de excepción constitucional que rige en el país por la crisis sanitaria, fue abordado violentamente por personal de Carabineros y Militares; detenido a punta de fusil, golpeado y discriminado durante todo ese proceso.
Según relata el afectado en el testimonio que fue presentado ante la justicia por el abogado del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) que lleva la causa de Serey, los hechos ocurrieron el pasado 22 de mayo, a las 11 de la mañana en las afueras de su casa, en la comuna de Maipú, cuando las fuerzas del orden procedieron de forma “invasiva y prepotente” contra su persona por no contar con el salvoconducto requerido para ir a comprar fruta a la feria, la que se encuentra a menos de 20 metros de distancia de su hogar.
Luego de forcejear con 5 funcionarios de Carabineros y 3 militares, a Congoman, como es llamado por la Comunidad Rastafari, le ordenaron que se tirara al suelo siendo apuntado por uno de los oficiales del Ejército. Una vez en el suelo y luego de quedar inconsciente por asfixia durante unos minutos, una mujer carabinera lo golpeó dos veces con su pie, uno de ellos en la cabeza. Fue arrastrado hasta el vehículo policial, esposado y violentado constantemente durante todo el trayecto hasta la 52º Comisaría de Maipú.
El texto señala que mientras lo golpeaban y tiraban de sus dreadlocks (pelo de los Rastafari considerado como simbólico y sagrado por quienes lo llevan), simultáneamente “los funcionarios lo insultaban con expresiones tales como: “rasta culiao”, “cochino de mierda”, “a estos culiaos hay que pegarles porque son puros volaos culiaos”, “le vamos a cortar el pelo para ver cómo queda”, entre otras ofensas y amenazas”.
Fue tal la magnitud de golpizas que recibió durante ese trayecto, que una vez en la comisaría la víctima fue arrastrada fuera del auto mareado, aturdido y “prácticamente no podía moverse”. Pero el abuso de poder no terminó ahí. Según continúa el relato, mientras estuvo en el calabozo, los insultos y humillaciones se prolongaron durante las tres horas que -declara- estuvo en el lugar: “Este rasta culiao cochino tiene el coronavirus, dejémoslo que se muera, cochino”; “fue el chascón conchasumadre”, “el perro culiao”, “hippie culiao”, “son puros vagos de mierda”, también recibió amenazas como “te voy a cortar el pelo chuchatumadre, porque gritaste, porque salieron tus vecinos agradece que no tenía gas pimienta, porque sino le habría tirado hasta a tu mamá”.
Daniel Serey se contactó con el INDH, institución que designó un abogado para interponer la querella criminal por violación de derechos fundamentales contra dos de los funcionarios que fueron identificados; contra Carabineros y todos quienes resulten responsables.
Mira la detención capturada por las cámaras de vigilancia del pasaje aquí (video sin audio):
