El gobierno alemán presentó las líneas maestras del futuro proyecto de ley que propone despenalizar el consumo, compra y posesión de entre 20 y 30 gramos de cannabis, sea en el ámbito privado o en espacios públicos.
Asimismo, la normativa establece que quedará autorizado su cultivo en unas “cantidades limitadas“, aún por precisar, pero que se estiman en “unas tres plantas” por persona.
La presentación de este proyecto, que fue aprobado por el Consejo de Ministros, fue realizada por el ministro de Salud, Karl Lauterbach.
“Será, cuando culmine, la legislación más permisiva de toda la Unión Europea”, afirmó el ministro, para quien la línea matriz de la futura normativa no es una “liberalización”, de acuerdo al modelo de los Países Bajos, sino una “regulación”.
Legalización para proteger a los menores de edad
El objetivo de la iniciativa es ahogar el mercado negro relacionado con la marihuana o el hachís y las redes criminales que lo controlan, para lo cual se prevé que su venta se realice en locales con la correspondiente licencia, que no necesariamente serán farmacias, según Lauterbach, buscando un suministro “controlado” del cannabis, de acuerdo al principio de la regulación que busca el ministro.
Lauterbach, doctor en Medicina y una de las voces más escuchadas en Alemania en los momentos más álgidos de la pandemia, estuvo en el pasado entre los contrarios a la legalización, pero cambió de parecer antes de convertirse en ministro.
El titular de Salud considera que legalizar y regular el acceso al cannabis es un asunto prioritario para la protección de los menores, entre los que se observa un aumento de adicciones a las drogas, mientras “florece” el mercado negro.
Primer paso: Evaluación de la Comisión Europea
Lauterbach insistió en que el primer paso para esta legalización será presentar ante la Comisión Europea (CE) estas líneas maestras del proyecto y someterlas a su evaluación “en conversaciones bilaterales”.
En caso que la iniciativa reciba una valoración positiva de la CE se presentará en forma de proyecto de ley ante el Parlamento alemán, lo que el ministro considera podría ocurrir en el primer trimestre del próximo año.
Según estimó el ministro Lauterbach, este podría ser un proceso complejo por lo que probablemente no se puede contar con la legalización hasta principios de 2024.