El cantante jamaicano de dancehall Kiprich fue acusado por “utilizar comunicaciones audiovisuales, visuales o de audio para promover actividades delictivas”, luego de ser interrogado por funcionarios de la policía de la Oficina de Investigación Criminal (CIB; por sus siglas en inglés) de St. Catherine North.
El veterano del dancehall, cuyo verdadero nombre es Marlon Plunkett, se entregó después de que la CIB lo nombrara esta semana como “persona de interés” tras el asesinato del supuesto líder de la banda criminal One Order, Othniel “Thickman” Lobban, ocurrido el pasado 22 de enero.
De acuerdo a las fuentes de la isla, Kiprich hizo un dubplate de One Order por encargo de un selector radicado en el extranjero tras la muerte de Lobban y, según su equipo de gestión, fue supuestamente “modificado” para expresar un lenguaje más provocativo del que se pretendía originalmente.
De acuerdo a la Policía, “Thickman” era una figura clave en el submundo criminal de Jamaica con influencia en varias zonas de la isla.
Luego de declarar ante la Policía, Kiprich fue puesto en libertad bajo fianza a la espera de su comparecencia ante el tribunal parroquial de St. Catherine, fijada para el próximo 21 de febrero.
“El señor Plunkett ha mantenido su inocencia, no estuvo involucrado en ninguna actividad pandillera y no incitó a la violencia en ningún estado ni de ninguna forma. Imputaremos las acusaciones”, afirmó el abogado del cantante, Patrick Peterkin, que lo acompañó en la declaración.
En tanto, el cantante de dancehall de 45 años compartió en sus redes sociales dos fotos de él sonriendo, pero no abordó sus problemas legales, mientras que en otra publicación compartió un video de él mismo en el estudio grabando nueva música, en el que niega estar involucrado en actividades delictivas.
