A propósito de los últimos casos de vulneración de derechos contra Rastafaris en Jamaica, líderes del movimiento realizaron una conferencia de prensa para lanzar la campaña internacional “Respect Rastafari”, demandando una intervención inmediata en las políticas de Gobierno respecto al trato y el respeto que las principales instituciones del Estado debieran tener para con los Rastas de la isla.
Colmados de indignación tras los repetitivos sucesos que han ocurrido desde los inicios del movimiento en Jamaica y, en particular, luego de la última noticia sobre la vulneración de derechos que vivió una jóven Rastafari quien fuera despojada de sus dreadlocks por parte de la policía sin autorización alguna, situación que se produjo un mes después de otro caso que afectó a un anciano Rastafari en un hospital público, la comunidad hizo una presentación con 10 demandas a implementar en el corto, mediano y largo plazo.
“La comunidad Rastafari ha sido objeto de hostigamiento y persecución irregular continua por parte de la policía y de violaciones de los derechos humanos, constitucionales, e indígenas que no ha cesado a pesar de la disculpa del Gobierno de Jamaica por las atrocidades de Coral Gardens, la Enmienda de la Ley de Drogas Peligrosas y promesas de protección legislativa de derechos para la comunidad Rastafari”, dicen en una misiva dirigida al Primer Ministro Andrew Holness.
En dicha carta, los impulsores de la propuesta son enfáticos en señalar que el Gobierno de Jamaica ha lucrado y creado una imágen país a nivel internacional gracias al uso de los símbolos, imagen y la cultura Rastafari, por lo mismo, exigen que se implementen varias medidas a la brevedad para terminar con el abuso y persecución contra el movimiento.
“Numerosas entidades públicas y privadas han cooptado de manera proactiva y conspicua las imágenes, la jerga, los símbolos y la vida Rastafari, incluida la música Reggae, y han comercializado los activos Rastafari como una parte central de la identidad de base y el producto turístico de Jamaica, que es el principal generador de divisas del país. Estos son indicadores claros de que el gobierno y la sociedad jamaicanos comprenden plenamente que el Movimiento Rastafari, sus atributos y productos indígenas son activos políticos y económicos sustanciales para Jamaica”, agregan.
Una de las principales demandas planteadas es la resurrección de la Junta Asesora Rastafari bajo el Ministerio de Justicia de Jamaica, como lo exige la enmienda de la Ley de Drogas Peligrosas de 2015 que legalizó la marihuana sacramental para los Rastafaris. Además, se propone expandir el mandato de la junta asesora para responsabilizar a todos los ministerios del gobierno en relación con los problemas rastafari. La hermana Goldi, una de las organizadoras del grupo, dijo: “Rastafari ya no tolerará el uso gubernamental de su imagen y vida para vender Jamaica junto con el abuso ilegal y desenfrenado”.
El objetivo es empoderar a la Familia Rastafari para que conozca y exija sus derechos, para trabajar con las autoridades en los cambios y el cumplimiento de las leyes y la erradicación de la mentalidad colonial.
La campaña -que además cuenta con una plataforma digital de recolección de firmas- busca aumentar la presión internacional para garantizar que el gobierno de Jamaica rinda cuentas y aborde el acoso y abuso reciente y continuo que enfrenta la comunidad Rastafari en Jamaica en relación con múltiples violaciones de derechos humanos, indígenas y constitucionales.
“Rastafari es la base de la industria de la marihuana en Jamaica, pero ahora es la piedra que el constructor rechaza. Sin derechos no puede haber paz”, afirmó otro organizador, el anciano Rastafari y antiguo defensor de la marihuana Ras Iyah V.
Firma aquí la petición y revisa a continuación las 10 demandas del movimiento:
